MI VIDA COMO ENEATIPO #5
En este post te cuento como es “Vivir siendo un 5”. Conocerás mis vivencias, aprendizajes y las claves que me permitieron superar mis limitaciones.
MI HISTORIA DE REINVENCIÓNDESARROLLO PERSONAL
11/23/20239 min leer
MIS EXPERIENCIAS SIENDO UN ENATIPO #5
Toda mi vida me sentí diferente al resto.... chan!
Quizá esta sea tu historia también. Ciertamente, todos tenemos peculiaridades, ¡y que bueno que así sea!
Sin embargo, yo siempre me sentí muy aislada emocionalmente de los demás, incluso de mi familia. Siempre como un observador externo a lo que sucedía a mi alrededor, sin casi permitirme interactuar con ello.
No fue hasta hace poco que descubrí que mi esquema mental, también llamado eneatipo dominante, tenía todo que ver con mi peculiar forma de entender la vida.
¿Quieres que te cuente más? Si has respondido sí, entonces ¡aquí vamos!
AISLAMIENTO EMOCIONAL: La pieza fundamental del rompecabezas.
Desde que tengo uso de razón me he sentido como el “bicho raro”. Jamás disfruté de ningún encuentro social, amistoso, e incluso familiar (por suerte para mí en mi familia los había muy pocos).
Cuando era pequeña no podía entender cómo la gente interactuaba entre si con tal grado de entusiasmo y alegría. La cercanía que demostraban entre ellas me resultaba algo inalcanzable para mí, por lo que me mantenía a buena distancia simplemente observando lo que acontecía.
Esta ha sido la dinámica de mi vida.
Si sientes que a ti te ha pasado o aun pasa lo mismo y sufres por ello, te tengo una noticia: puede superarse.... o al menos limarse jaja Déjame que te siga contando.
Arriba mencioné un sentimiento clave, el sufrimiento. Te voy a contar cuándo llegó.
Como todo se agudiza en la adolescencia –porque se ‘adolece’-, esa sensación de falta de ‘ubicación’ o ‘pertenencia’ en los entornos sociales que había experimentado en la niñez, se transformó súbitamente en enajenamiento durante la adolescencia y juventud temprana.
En esas etapas, la inadecuación y aislamiento voluntarios fueron percibidos por mi como un rechazo masivo al que era sometida por los demás. ¡Jaja, ni que todo el mundo se hubiese complotado contra mí!
Pero claro, en aquel momento de mi vida no tenía la conciencia suficiente para saber que lo que percibimos en el mundo exterior es un reflejo de nuestro interior.
Además, tampoco conocía el Eneagrama. Créeme que cuando descubrí la existencia de esquemas mentales característicos fue una revelación y la puerta hacia un entendimiento más profundo de mi propia psique, lo que me permitió en definitiva dar respuesta a tantas incertidumbres que me habían acompañado desde siempre.
Ok, como habrás intuido, me la pasé muy mal durante la adolescencia. Solo tenía una amiga cercana –bicho raro como yo-, y no participaba en ninguna actividad propia de los jóvenes de mi edad. De más está decir que no fui a ninguna fiesta ni discoteca, salvo una celebración de cumpleaños aquí y allá, hasta cerca de los 20 años.
Durante esa fase de mi vida, la otra característica típica del eneatipo 5, se potenció aún más. Me refiero a ‘vivir desde la mente’. Claramente esto era consecuencia de la falta de interacción humana.
Si bien siempre había sido muy racional y casi nula emocional, en la preadolescencia se dio un hito muy destacable. Tenía 11 años cuando un día me dije a mi misma “Dios no existe, solo soy yo y mis logros” ¡OMG!
Viendo en retrospectiva ese momento, que quedó grabado en forma indeleble en mi memoria, puedo decir que fue la consumación de un cumulo de sentimientos y emociones que había acallado y ocultado. Siendo carente de herramientas más sanas para canalizar mi activo mundo interior -desapercibido exteriormente-, mi respuesta en ese momento fue reforzar aún más mis características de ensimismamiento y aislamiento.
Me autoproclamé en ese momento mi propio Dios.
VIVIR DESDE LA MENTE
¿Tal vez has escuchado decir que el Ego es poco menos que una maldición que atormenta a la raza humana? jaja!
Ok, no voy a quitar la nota ‘malvada’ para no estropear su mala fama. Ciertamente el Ego es una máscara que oculta nuestra verdadera esencia. Sin embargo, también quiero darle su crédito.
Soy una convencida de que el Ego, es en el fondo ‘un buen chico’. Gracias a él logramos adaptarnos y subsistir cuando no tenemos herramientas de autoconocimiento, ni conscienciales para interpretar la vida como lo que es, una Universidad para la evolución humana.
Nuestra misión, a medida que vivimos, es evolucionar en consciencia de forma de trascender aquellos aspectos del Ego que ya no son útiles, o que incluso entorpecen esa evolución. Si no lo hacemos, entonces permaneceremos estancados, sufriendo sin poder dar respuesta a las ‘cosas que nos suceden’.
Ok, pero ¿qué tiene que ver esto con mi historia como eneatipo 5? Tiene mucho que ver, te cuento.
Mas arriba te dije que a los 11 años decidí que no había un Dios y que yo me haría cargo de mí misma. En ese momento terminé por ceder todo mi poder al Ego. Si antes hubiese esperado alguna ‘ayudita externa’, a partir de esa decisión, cedí absoluto control a mi mente racional egoica, quien campó a sus anchas por muchos, muchos años.
No te voy a mentir, la racionalización exhaustiva de cada situación y decisión trajo consigo sus beneficios. Por ejemplo, una vez que decidí que la abogacía ‘era para mí’, entonces cursar la carrera y obtener el título fue casi pan comido. Lo intelectual, lógico y que involucrara horas de estudio y síntesis era mi zona de confort – y sigue siendo en gran medida-.
Pero como podrás darte cuenta, durante esta fase, la desconexión con mi mundo emocional se profundizó. Yo era básicamente un cerebro siendo transportado por un cuerpo.
Recuerdo que durante esa etapa algunas personas ‘osaron’ decirme que yo era muy fría e inaccesible –y reconozco que sí lo era-. Sin embargo, como nada podía hacer para remediarlo, mi guía ‘Don Ego’ optó por dejar de preocuparse por esos comentarios que en el fondo tenían la buena intención de pretender ‘hacerme ver’ que debía abrirme más a los demás. En esa época yo simplemente era incapaz de hacerlo.
Antes de que se te caiga una lágrima por mi –jaja es broma-, déjame que te cuente que no todo fue frialdad y desapego. Sí tuve un par de novios durante esa etapa, el segundo incluso se convirtió en mi primer esposo.
Podrás preguntarte, pero ¿¡cómo fue eso posible para un 5 tan extremo!?
Que bueno que lo preguntas porque para mí también era una interrogante! Claro que cuando conocí el eneagrama, la respuesta se desplegó ante mis ojos. Oh si claro, el eneatipo 5 puede formar vínculos fuertes con un círculo reducido de personas.
Créeme que esto me tranquilizó bastante, al final podía salir del rol de Robocop!
EL ‘LADO EMOCIONAL’ DEL ENEATIPO #5
¡¡Sí, existe!! (Aplausos jaja) Cierto, los eneatipo 5 tenemos esperanza.
En mi caso yo viví un proceso de transformación que quiero compartir contigo porque siento que ese es mi gran aporte para aquellos 5 que van por el mundo padeciendo el aislamiento y la ‘ermitañez’ si se me permite la palabra (inventada jaja).
Primero que nada, te cuento que, si de ermitaños se trata, yo me apunto al top 5.
En el cenit de mi impulso y necesidad por aislarme, me aparté de todo y todos a quienes hubiese conocido. En esa lista fueron: mi país, mis trabajos, la amiga de la adolescencia que te mencioné antes, mis pocos conocidos y familiares, mi esposo 1 y luego mi esposo 2, mis costumbres y hasta mi idioma!
Lo único que no dejé atrás, fueron –y siguen siendo- mis hijos.
Si no has leído mis primeros posts donde te cuento sobre mi periplo de vida que me trajo a vivir aislada de prácticamente todo el mundo en el norte de Estados Unidos, entonces te invito a que lo hagas para que todo esto de haga mucho más sentido.
Ok, sigamos...
Junto con la necesidad de aislamiento o más bien de dejar atrás todo lo que había vivido hasta entonces, también vino una fase de replanteamiento profundo de mi propia existencia.
Quizá hayas escuchado hablar de la ‘Noche Oscura del Alma’. Estoy convencida que todos la vivimos en algún momento. Está en el ADN del ser humano el impulso por reconcentrarse con su esencia divina. Lamentablemente no todos perciben la gran oportunidad de evolución que brinda el hacerse consciente de esa oscuridad y aprovecharla para el ‘gran reseteo’ de mente y espíritu.
En mi caso, la gran señal, además de la profunda crisis existencial –que también se suele llamar ‘noche oscura del alma’-, fue la necesidad de desprenderme de mi identidad. ¡¿Whatt?!
Si, así como lo lees. ¡Dejar de ser yo!
Créeme que para alguien que vive desde su mente, con un ego tan fuertemente anclado y dominante, dejar atrás todo lo que le resulta familiar, es toda una proeza.
Pero una vez más, las crisis nos traen esa gran oportunidad –o bendición-, la de hacer un reseteo y volver a empezar habiendo aprendido y evolucionado en conciencia.
Para poner todo esto a tierra, porque puede que te suene un poco ‘volado’. ¿A qué me refiero con dejar de ser yo y resetearme?
Me refiero a que el paradigma desde el que había vivido por más de tres décadas estaba eclosionando, a punto de estallar en pedazos. ¿Y cómo lo notaba? Fácil... era profundamente infeliz.
¿Y dónde está la bendición en todo esto? En que, como consecuencia de esa infelicidad que ya no podía tolerar, decidí hacer un salto de fe y un cambio rotundo en mi vida.
Te aseguro que cambiar no es fácil, duele, trae consigo más incertidumbres que certezas. Pero a medida que lo transitas con la convicción de que lo bueno está al final del túnel oscuro, la luz comienza a asomar, las señales de que vas por el camino correcto comienzan a multiplicarse.
¿Qué te quiero decir con esto?
Que muchos, la mayoría, atraviesa la o las crisis existenciales –porque si no lo escuchas la primera vez, la vida suele darte otro ‘plato de sopa’-, a ojos cerrados.
Cuando lo haces de esta forma, negada a aprender algo de esa fase, probablemente porque crees que no hay nada bueno que extraer de ella y todo lo que haces es esperar – o rezar- para que pase, entonces te pierdes la oportunidad de evolucionar, de crecer en conciencia y en definitiva de conquistar una vida mejor.
Mi invitación es a que aproveches las crisis de tu vida para reflexionar. No as veas como 'malas fases' que te han tocado en desgracia. Abrázalas, pídeles que te digan por qué están aquí. ¿Qué te quieren mostrar?
Posiblemente no te guste lo que veas. Si le preguntas y estás dispuesta a escuchar con apertura la vida te mostrará tus “caquitas” (esta expresión se la estoy copiando a Borja Vilaseca, gracias Borja!)
Puede que pienses: ¿qué tiene de conveniente ver mis propias “caquitas”? La respuesta es, que puedes limpiarlas, transformarlas en flores. Recuerda que el Autoconocimiento es el inicio de todo proceso de transformación y crecimiento personal, así que no te niegues a confrontar con tu dolor. Puedes trascenderlo como lo hice yo.
UN ENEATIPO 5 TRANSFORMADO: O en proceso...
El proceso no termina nunca, siempre hay oportunidad de evolucionar aún más. Crecer en consciencia, volvernos mejores seres humanos.
Para terminar, te voy a hablar de mi propia transformación, del punto en el que me encuentro ahora.
Como te decía antes, gracias a conocer el eneagrama, pude comprender que muchas de las interpretaciones o particulares formas en que había vivido situaciones a lo largo de mi vida, tenían todo que ver con el esquema mental propio del eneatipo 5.
Esto me sirvió para de forma inmediata dar respuesta a múltiples incertidumbres que me habían acompañado a lo largo de los años. Logré dar sentido a muchas actitudes y procesos mentales. Y lo más importante, dejé de culparme por mi ‘forma de ser’.
Conocer estas facetas sin dudas me ha permitido trabajar sobre los aspectos que me acercan al ego, como la arrogancia intelectual, el aislamiento y la desconexión emocional.
Pero también me permiten profundizar en mis ‘puntos fuertes’ como son la potencialidad para compartir mis conocimientos -que si no se ponen en servicio de otros solo son información inútil-.
A través de este blog y de posts que como éste pretende trasmitirte información valiosa y vivencias reales, es como yo entiendo que puedo evolucionar como eneatipo 5, trascender mis limitaciones y en definitiva transformarme. Así que gracias a ti querida lectora por eso.
Si eres un 5, por favor, por favor, envíame un mensaje. Haz este ejercicio para salir de tu cueva, aunque solo sea enviándome un email. ¡Tú puedes!
Y si no eres un 5 de igual manera puedes enviarme un mensaje para darme tu opinión o incluso contarme tu experiencia como eneatipo #…. ¿Quién sabe? Tal vez podemos iniciar una saga de posts donde sean ustedes las lectoras quienes cuenten sus historias. ¡Genial!
Y ahora sí que me despido hasta el siguiente post. ¡Nos leemos!