AMOR PROPIO LA CLAVE PARA EL ÉXITO

¡Hola!

¿Alguna vez relacionaste el amarte a ti misma con tu nivel de éxito en la vida?

Si tu respuesta es no, ¡Bienvenida al club!

Antes, jamás se me hubiese ocurrido que ambas cosas guardaban relación. Vaya, ni siquiera me había dado cuenta de lo poco que me quería y respetaba a mí misma y de que eso afectaba negativamente cada aspecto de mi vida.

Si tú también prescientes que es algo que puede estar pasándote a ti, quédate, porque te voy a contar cuán importante es el amor propio para tu éxito.

Y mejor aún, te voy a decir lo que debes hacer para fortalecer tu amor propio. ¡Vamos!

• ¿QUÉ ES EL AMOR PROPIO?

En pocas palabras el amor propio es la relación que tienes contigo misma. Se vincula con cómo te percibes a ti misma y para eso es fundamental conocerte y aceptarte tal como eres.

Esto no implica que creas que eres perfecta, o que te conformes y no te esfuerces por mejorar, sino que reconozcas tus imperfecciones y tus procesos sin dejar de valorarte.

Amarte a ti misma también se relaciona con otros conceptos fundamentales que te invito a ejercitar. Aquí van:

1. Priorízate: Entender y atender tus necesidades es fundamental. Lamentablemente, muchas de nosotras hemos crecido en ambientes donde la mujer no se priorizaba. Y de allí, la culpa que sentimos cuando ‘osamos pensar’ en nosotras primero. Sin embargo, cuidarnos y respetarnos es el primer paso hacia el amor propio.

2. Perdónate: No ser dura contigo misma. No te exijas tanto. No cargues con tanta culpa. ¿Cierto que se lo dirías a una amiga? ¿Entonces por qué te cuesta tanto aceptarlo y aplicarlo a ti misma?

3. Libérate: Deja de aceptar todo aquello que es inaceptable para ti. Esto incluye situaciones, lugares y hasta personas. Estamos demasiado acostumbradas a tolerar y las razones son muchas: ser aceptadas, no decepcionar, quedar bien, etc. etc. Lo cierto es que nada de eso importa, lo único importante es que nutras tu vida solo con lo que es bueno y gozoso para ti.

4. No te compares: Deja de ansiar la aceptación y reconocimiento externos. Créeme, una vez que te aceptes y reconozcas a ti misma, comenzarás a proyectarlo afuera. Entonces ya no necesitarás la opinión favorable de los otros (aunque la recibas más que antes).

Todo esto suena muy bien, ¿cierto? Sin embargo, si eres como yo, te estarás preguntando: ¿Como rayos llevo todo esto a la práctica? Te entiendo, yo me hice la misma pregunta.

El truco que descubrí y que me funcionó para comenzar a amarme en serio, no fue autoimponerme nada, sino hacerme consciente del daño que me hacía al no tener un amor propio fuerte y sano.

El impacto psicológico que causó en mi la información que te compartiré ahora, fue el puntal para mi cambio.

• ¿QUÉ PASA SI NO TENGO AMOR PROPIO?

Hazte consciente de los perjuicios que implica esta carencia y cómo impacta negativamente en tus posibilidades de éxito.

• Te invalidas. Te vuelves tu crítica #1 y las más despiadada. Piénsalo: ¿le dirías a tu amiga o a tu hija lo que a veces te dices a ti misma? Ser demasiado autoexigente contigo misma, lejos de ‘fortalecer tu carácter’ socaba tu autoimagen y sentido de valía.

• Procastinas: Como consecuencia de invalidarte te vuelves más dubitativa por temor a equivocarte y muchas veces, también al ‘que dirán’. Entonces, mides tu valor a través de las opiniones de los demás sin cuestionarlas.

• Te resignas: Cuando la procrastinación y las inseguridades ganan terreno, sucumbes a la idea de que no eres capaz y te resignas.

• Entregas tu poder: Una vez te resignas, dejas de ser cocreadora de tu destino para ‘dejarte llevar’ por las circunstancias de la vida.

Wow! ¿Dime si esto no te ha ‘volado la cabeza’? porque lo hizo conmigo.

En el momento en que me percibí tan desvalida, siendo incapaz de diseñar mi vida y a merced de circunstancias que no dependían de mi decisión, hice un ‘pare en seco’ y me prometí retomar las riendas.

Ojalá que lo mismo te suceda a ti. Sigamos.

Te voy a hablar ahora de lo bonito y beneficioso que es tener tu amor propio bien en alto:

• BENEFICIOS DE QUERERTE

• Tus niveles de bienestar, autoestima y felicidad subirán como cohetes de autopropulsión. Esto significará una mayor estabilidad emocional y disposición para alcanzar el éxito, ya que te visualizarás como una mujer capaz de alcanzar sus objetivos.

• Tu prioridad pasará a ser cuidar y respetar tus necesidades y tus deseos, permitiéndote hacer todo aquello que disfrutas. Te comprometerás con tu mejora constante, pero aceptando tus imperfecciones.

• Te volverás cada vez más experta en gestionar bien tus emociones, te responsabilizaras con tu bienestar y aprenderás a poner límites saludables.

¿Dime si todo esto no te estimula y emociona?

Ahora te cuento como hice yo para crecer mi amor propio.

• CÓMO COSECHAR TU AMOR PROPIO

• Conócete: El autoconocimiento es FUN DA MEN TAL para tu proceso de desarrollo personal y autoestima. Nunca dejes de escucharte ni de buscar quién eres. Comienza por descubrir cuáles son tus virtudes, tus necesidades y tus deseos.

• Reorganiza tus prioridades: Esto implica dos aspectos fundamentales:

  1) Repítete que tu bienestar es primordial. No puedes dejarte al final de tu lista de prioridades o todas tus obligaciones pasarán por encima de ti.

  2) Observa en tu entorno aquellas situaciones o personas que están tomando mucha energía de ti y destruyen tu amor propio. Valora un cambio y alejarte de esas fuentes de malestar.

• Adapta tus exigencias: Ponte metas que puedas ir cumpliendo para sentir que avanzas. Hazlo a tu ritmo, aplaudiendo tus progresos. Aprovecha estos logros para dialogar contigo de forma constructiva y optimista.

• Déjate cuidar: Tener amor propio no es ser autosuficiente siempre, también implica saber pedir ayuda y dejarte cuidar. Además, esta es una forma grandiosa de reforzar los vínculos con las personas que amas.

• RESUMEN:

Amarte a ti misma es la base para una vida más feliz y satisfactoria. ¿Qué es lo que buscamos en la vida, sino ser felices?

Aunque la afirmación resulte obvia, resulta que a mí me tomo media vida darme cuenta de eso y salir al encuentro de mi amor propio. Por eso te trasmito mi vivencia y mis aprendizajes.

ÁMATE, PRIORÍZATE, MÍMATE, HAZTE LOS GUSTOS, VIVE UNA VIDA QUE VALGA LA PENA SER VIVIDA!

¡Nos leemos en el siguiente post!

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